Las celebraciones de fin de año tiene entre sus principales protagonistas y beneficiarios dentro del movimiento comercial, a las micro y pequeñas empresas. Dos millones de aquellas unidades de negocio son partícipes de esta campaña. De ese total 500 mil son microempresas.
La tasa de interés promedio para estos negocios oscila entre 30% y 32%. Pero, si se trata de clientes con buen comportamiento de pago, el precio puede bajar a 22% en Crediscotia, precisa Héctor Nalda, gerente de Ventas Dirigidas de la empresa.
Las campañas de fin de año –según el rubro– pueden representar el 50% de las ventas anuales de una empresa. Emprender puede ser muy exitoso.
Ya en la segunda quincena de setiembre, es un poco tarde para iniciar un emprendimiento vinculado a esta campaña, por ello el tiempo para definir el negocio debe ser en agosto. Sin embargo, hay oportunidades para las personas interesadas en la venta de productos. Los negocios vinculados a regalos o servicios son los más exitosos.
Para César Fernández, gerente de Inteligencia Comercial de MiBanco, las campañas navideñas tienen tres etapas: la primera es donde los clientes piden capital de trabajo para adquirir mercadería, la segunda parte para comercializar los negocios y la última etapa, que se da a fines de noviembre y comienzos de diciembre, son solo para el cliente consuma.
Antes de empezar la campaña, las personas interesadas deben conocer el mercado y recabar experiencia en el rubro elegido o contar con alguien que tenga conocimientos. Asimismo, es importante que se ofrezca un producto diferenciado, no solo en el precio, sino también en la atención que se da al venderlo. Y hay que estimar adecuadamente el financiamiento que va a necesitar para no quedarse sin caja a mitad de la campaña.
Dentro de los pasos para hacer una buena campaña, existen cinco ítems que les puede servir a aquellos que desean tener una navidad fructífera: Investiga el mercado, revisa la tendencia y planifica tu estrategia y financiamiento. Ordena tus inventarios (materia prima, insumos y productos finales) y asegúrate de tener buenos proveedores.
Busca la mejor alternativa de financiamiento. Sé cauto en el uso del dinero. Cuida tu logística para que tu producto esté en manos del cliente en el momento y lugar adecuados. Encamina tu fuerza de ventas a superar las expectativas de tus clientes.
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